Literatura de Australia

Entre los temas más frecuentes se encuentran la identidad indígena y de los colonos, alienación, exilio, etc. Entre los escritores australianos que han obtenido renombre internacional se encuentran el Ganador del Nobel, Patrick White, así como los autores Christina Stead, David Malouf, Peter Carey, Bradley Trevor Greive, Thomas Keneally, Colleen McCullough, Nevil Shute y Morris West.

[1]​ Entre los autores importantes de obras clásicas australianas se encuentran los poetas Henry Lawson, Banjo Paterson, C. J. Dennis y Dorothea Mackellar.

Entre los poetas más importantes del siglo XX se encuentran Dame Mary Gilmore, Kenneth Slessor, A. D. Hope y Judith Wright.

Entre los poetas contemporáneos más conocidos se encuentran Les Murray y Bruce Dawe, cuyos poemas suelen estudiarse en los institutos australianos.

En cuanto a la literatura infantil, Norman Lindsay (El budín mágico), Mem Fox (La magia de la zarigüeya) y May Gibbs (Snugglepot y Cuddlepie) figuran entre los clásicos australianos, mientras que Melina Marchetta (Buscando a Alibrandi) es un clásico moderno de la ficción para jóvenes adultos.

Entre los dramaturgos australianos más destacados se encuentran Steele Rudd, David Williamson, Alan Seymour y Nick Enright.

Las obras iniciales tienden a ser de una gran variedad, con historia sobre la nueva frontera del outback australiano.

Estos novelistas también proveyeron de información valiosa sobre las colonias penales que ayudaron a formar el país, así como sobre los primeros asentamientos rurales.

La primera novela australiana, Quintus Servinton: A Tale founded upon Incidents of Real Occurrence, fue escrita y publicada en Tasmania en 1831.

[5]​ En 1838, la novela gótica The Guardian: a tale de Anna Maria Bunn fue publicada en Sídney.

Banjo fue responsable de crear probablemente la más famosa canción popular australiana Waltzing Matilda, la cual ha sido propuesta como himno nacional.

Otros escritores notables que han surgido desde la década de 1970 son Kate Grenville, David Malouf, Helen Garner, Janette Turner Hospital, Marion Halligan, Susan Johnson, Christopher Koch, Alex Miller, Shirley Hazzard, Richard Flanagan, Gerald Murnane, Brenda Walker, Rod Jones y Tim Winton.

Otros novelistas que utilizan temas internacionales son David Malouf, Beverley Farmer y Rod Jones.

[20]​ Otros autores considerados "grunge lit" son Linda Jaivin, Fiona McGregor y Justine Ettler.

Linda Jaivin no está de acuerdo con poner a todos estos autores en una categoría, Christios Tsiolkas calificó el término de "creación mediática", y Murray Waldren negó que el grunge lit fuera siquiera un género nuevo; dijo que las obras son en realidad un tipo del género preexistente del realismo sucio.

La tesis doctoral de Michael Robert Christie de 2009, "Unbecoming-of-Age: Australian Grunge Fiction, the Bildungsroman and the Long Labor Decade" afirma que existe un género llamado "post Grunge [lit]" que sigue al periodo grunge lit. Christie nombra tres ejemplos de "post-grunge lit" australianos: Elliot Perlman Three Dollars (1998), Andrew McCann Subtopia (2005) y Anthony Macris Capital.

Patrick White se convirtió en el primer australiano en recibir el Premio Nobel de Literatura en 1973.
Marcus Clarke en 1874.
Fotografía de Henry Lawson (1902).
Monumento en Melborune de Adam Lindsay Gordon.