Los estados carenciales es una novela de Ángela Vallvey, ganadora del premio Nadal en 2002.
Vili es el director de una peculiar Academia donde ayuda a los alumnos a encontrar la felicidad.
Vili somete a sus alumnos a una exploración interior y les hace ver en ellos mismos la grandeza y ridiculez humanas.
La autora utiliza el melodrama para desarrollar la historia, sin embargo también utiliza el sarcasmo y la ironía.
Su aparente frivolidad sirve para dudar de las verdades tradicionales y estar de acuerdo o derribarlas.