Pero en tanto que Ayla y Jondalar se preparan para convertirse formalmente en pareja durante la Reunión de Verano, se presentan dificultades.
Algunos temen la influencia de Ayla y detestan su relación con aquellos a quienes llaman cabezas chatas y ella llama Clan (los Neanderthal), con los que se crio.
Otros incluso se oponen a que forme pareja con Jondalar, hijo de la exjefa de la tribu, y hacen evidente su disgusto.
Ayla tiene que recurrir a todas sus habilidades, inteligencia, conocimientos e instintos para poder hallar el camino en esta complicada sociedad.
Sin embargo, aún debe decidir si está dispuesta a desempeñar un papel significativo en el destino de los Zelandonii.