Desde pequeño tuvo que abandonar la escuela e incorporarse a realizar varios oficios tales como: mozo de limpieza, limpiabotas, buzo, sereno y procurador público.
La situación económica y política imperante le hizo tomar conciencia de la causa cubana por la libertad.
Se relaciona con la actividad revolucionaria cuando participa en un acto organizado por Agustín Martín Veloz en Manzanillo para recordar el Día Internacional de los Trabajadores.
En 1930 se une al Partido Comunista de Cuba y participa en actividades contra la dictadura machadista y la amenaza nazi-fascista que amenazaba al mundo por esos tiempos.
Trabaja en la primera alcaldía comunista de Cuba encabezada por Paquito Rosales, donde realiza una destacada labor.