Varios miembros de la Policía Nacional de Colombia, entre ellos Harby Damián Rodríguez Díaz y Juan Camilo Lloreda Cubillos, (patrulleros capturados hasta el momento), lo agredieron y lo torturaron con pistolas taser, mientras él clamaba "Ya, por favor, ya no más", y los transeúntes que presenciaban y registraban los hechos, de igual manera lo exigían a los uniformados.
[7] Posteriormente, le infringieron fuertes golpes en el CAI de la Policía de Villa Luz, que, según la misma Fiscalía, funcionaba como un recinto que ofrecía impunidad a este acto.
[8] Allí recibió varios golpes cuyos autores y formas aún son materia de investigación, pero cuyas evidencias y consecuencias ya fueron claramente evidenciadas en los informes presentados por la Fiscalía General de la Nación y Medicina Legal.
Esto descandenó una serie de rechazos, protestas y disturbios en la sociedad colombiana,[10][11] cuyas consecuencias fueron varias alteraciones del orden público, violencia, y un nuevo saldo de brutalidad y homicidio por parte de la Policía[12] En la tarde del miércoles 9 de septiembre la gente, indignada por el suceso que fue filmado en múltiples videos, empezaron a hacer protestas frente al CAI donde presuntamente golpearon al ciudadano Javier Ordóñez hasta causarle la muerte.
Al principio se había convocado una velatón y cacerolazo, pero la idea fue rechazada.