Dicha población es célebre por sus cerámicas de loza fina, que comenzaron a fabricarse en la ciudad en el siglo XII.
Son las pequeñas obras escultóricas en mayólica policromada, realizadas en relieve o corpóreas, de tema sagrado y profano, que se caracterizan como algo mágico.
Las formas más comunes fueron las del repertorio destinado a la farmacia: cajas de píldoras, albarelos, tarros y frascos grandes globulares.
Surgió una paleta que diluyó los colores, azul amarillo o naranja, hasta casi desvelarla mediante su aplicación sobre las manufacturas blancas de forma sinuosa y perforada.
[36] Más tarde, a finales del siglo XV, en los talleres de Umbría, incluidos los de Deruta y Gubbio, en activo desde finales del siglo XIII, así como el menor de Gualdo Tadino profundamente influenciado por el cercano Gubbio, se acercaron a los temas preferidos del periodo tardo gótico que reproducían en los tarros especialmente destinados a farmacias.
Alrededor, toda la superficie está pintada con una corona de perlas que se alternan con bayas en relieve.
[37] Muchos ceramistas de Gubbio fueron los que trataron con gran habilidad la técnica del reflejo metálico, entre ellos Traversi, Floris, y Giacomo di Paoluccio.
Con respecto a la producción historiada en Deruta no está especialmente reconocida, un lugar de excepción lo ocupa hacia la mitad del 1500 el artesano ceramista Giacomo Mancini, conocido como "El Frate", con sus grandes platos de pompa adornados con reflejos metálicos.
En Pesaro se produjo la cerámica mayólica desde la primera mitad del siglo XV, en su adhesión al estilo arcaico.
[41] En la región de Emilia-Romaña, además de en Faenza, se produjo cerámica desde la época etrusca en la vecina Forli, y desde la Edad Media en Rimini, una ciudad favorecida por la presencia en su territorio de una excelente arcilla para su uso en cerámica, con temas dirigidos principalmente para celebrar a sus respectivos señores, los Ordelaffi, Girolamo Riario y Caterina Sforza en Forli; los Malatesta en Rímini, encontrándose así, sobre las diferentes piezas los escudos heráldicos.
Alumno de Nanni di Banco, es un artista considerado un precursor del renacimiento junto con Donatello, Masaccio y Lorenzo Ghiberti.
Su capacidad como investigador de nuevas técnicas, le hizo inclinarse para realizar la terracota vidriada en obras escultóricas.
Siguió esta línea escultórica bajo la actividad de los hermanos Santi y Benedetto Buglioni, con los cuales a fines del siglo XVI se puso fin al arte de la terracota vidriada como escultura, del estilo «Della Robbia».
La parte posterior de la jarra está decorada «a la porcelana» método generalizado en la cerámica toscana y faentina en el primer cuarto del siglo XVI.
Entre los nuevos temas decorativos desarrollados a finales del siglo XVI, comunes en la zona faentina y de Pesaro, que aparece, incluso en Montelupo, se encuentran las «hojas azules bipartitas» que adornan la cerámica hasta el final del siglo XVI.
Desde decoraciones fantásticas unidas a las geométricas llenas de personajes hasta finales del siglo XV con variantes en la fabricada en Montalcino de grutescos y «a la porcelana» con la que toda la zona sienesa llegará hasta final del siglo XVI.
[61] Se encontraron restos arqueológicos referibles al periodo arcaico, con una fuerte presencia de cerámica incisa y con engalbado, dejando al descubierto a través del tiempo, en su producción, una considerable madurez decorativa, hasta final del siglo XV, cuando numerosos alfareros venecianos ya reunidos en un gremio, demostraron que habían alcanzado una notable fabricación de cerámica formal y estilística.
[63] El maestro Domenego sobre todo empleó los temas vegetales en la decoración, que se distinguen por los colores vivos y brillantes, hábilmente combinados por un ritmo «suelto» de gran elegancia.
Bianchi continuó, con una excelente calidad, el estilo caligráfico fitomórfico en monocromía azulada, dentro de particiones en «cuartos», a veces se complementó con recuerdos historiados del manierismo pasado y emblemas heráldicos.
Sin embargo, desde la segunda mitad del siglo XVII la cerámica veneciana sufrió un lento y progresivo decaimiento hasta el extremo que a finales de ese mismo siglo, había activos muy pocos talleres en la ciudad de Venecia.
Milán, que había vivido desde la Edad Media hasta el renacimiento, una época fructífera de la cerámica.
[75] Descendiendo por la península, en la Toscana, permanecieron activos durante el siglo XVII los talleres de alfareros en Montelupo Fiorentino.
[81] En Campania,[82] durante el siglo XVII estuvieron activos los alfares de Ariano Irpino,[83] y Cerreto Sannita[84] se caracteriza ssu cerámica por una decoración popular con colores brillantes.
Los alfareros de esta famosa fábrica se distinguieron siempre por su fino repertorio en el que interpretaron magistralmente los motivos orientales y rococó.
En perfecta continuidad con la tradición del siglo XVII, vivió hasta la mitad del siglo XVIII, su punto más alto, debido a la serie decorativa que tuvo una amplia resonancia en el mercado del siglo XVIII con la mayólica de los ceramistas Grue, Gentili y Cappelletti que exportaron y vendieron en los grandes mercados de Nápoles, Freeze, Senigallia y Fano.
En Puglia, surgió la figura del maestro alfarero Leoanrdo Antonio Cocolla que prosiguió con la serie devocional ya ampliamente instalada en toda el área ceramista.
[108] Durante la primera mitad del siglo XIX la mayólica italiana atravesó una fase de decadencia lenta y progresiva, con la recuperación de los modelos del siglo XVIII y sus cualidades estilísticas la hizo volver a sus momentos más populares.
El museo exhibe obras significativas de una larga lista de artistas que en el siglo XX han realizado la técnica de la cerámica y el museo exhibe obras significativas: desde Galileo Chini, Alfredo Biagini, Giosetta Fioroni, Ettore Sottsass, Duilio Cambellotti, Salvatore Fancello, Tullio d’Albissola, Lucio Fontana, a Golia e Fausto Melotti, Alberto Burri, Enrico Baj, Giò Ponti, Nanni Valentini, Antonio Zancanaro, Aligi Sassu, Giuseppe Macedonio y otros.
Centros de cerámica antiguos de gran tradición han resurgido espontáneamente, con una rica producción de aspiraciones innovadoras: Vietri sul Mare, Albissola Marina, Nove, Deruta, Montelupo Fiorentino, Pesaro y Sesto Fiorentino, a la vez que manufacturas como Richard Ginori, Società Ceramica Italiana, Gregorj, Galvani, MGA, Franco Pozzi, Laboratorio Pesaro, Lenci, Bitossi, Mancioli y Rometti.
Completan esta sección el repertorio relacionadas con las culturas del Caribe, amazónica, andina meridional y de las pampas.