[7] Cualquier fibra que tenga un ancho menor a 1000 nanómetros (1000 nm o 1 μm) se define generalmente como una nanofibra.
[8] Una nanopartícula se define como un pequeño grupo de átomos o moléculas con un radio inferior a 100 nanómetros (100 nm).
[17] El electrospinning extrae nanofibras de soluciones poliméricas (sintetizadas mediante el proceso sol-gel) y las recoge para formar nanotextiles no tejidos.
[19] Cuando se aplican recubrimientos de nanoingeniería a telas, las nanopartículas forman fácilmente enlaces con las fibras del material.
Algunas aplicaciones, como la ropa resistente a las bacterias, aún no resultan prácticas desde un punto de vista económico.
Los nanotextiles utilizados en medicina pueden ser capaces de administrar antibióticos, medicamentos contra el cáncer, proteínas y ADN en cantidades precisas.
El electrospinning crea nanotextiles porosos que se pueden cargar con el fármaco deseado y luego aplicarse al tejido del área objetivo.
[19] Se han realizado muchos estudios para determinar los impactos que los materiales de nanoingeniería pueden tener en el medio ambiente.