El Kap, o 'Casa de los infantes reales', estaba adscrito al harén del faraón.
El Kap o Kep fue una prestigiosa institución egipcia, documentada ya desde el Imperio Medio, aunque tuvo su mayor desarrollo durante la dinastía XVIII.
Junto a estos preceptores, ayudados por una cohorte de sirvientes.
Las nodrizas reales también jugaron un papel importante, hasta el punto de que los faraones, en algunos casos, no dudaron en construirles suntuosas tumbas.
Algunos bien podían enorgullecerse de haber sido criados entre los niños reales, en la corte del rey, en su gabinete y harén y ser el favorito del rey entre todos.