Es una especie de pudín y se sirve generalmente como postre frío.
La elaboración se compone de huevos batidos y rebajados con leche hasta formar un líquido espeso.
Todo junto se hornea en un molde hasta que queda «cuajado» el huevo.
Se suele decorar con trazas de nata o frutas en almíbar diversas.
Este postre es muy típico y apreciado en la Región de Murcia, Albacete, Ciudad Real y Jaén; donde se hace de formas parecidas, aunque no igual.