Recibe su nombre de la tramontana, un fuerte viento Norte-Sur que caracteriza esta área litoral.
[3][4][7] El estudio agronómico de éstas fue llevado a cabo por Fundación Mas Badia (centro consorciado con el IRTA).
El cultivo tiene como objetivo el mínimo impacto ambiental y la prescindencia de químicos agrícolas.
[2] El trigo se cultiva de forma ecológica en el Parque natural de las Marismas del Ampurdán y se distribuyen entre los panaderos locales sin intermediarios.
[3][4][6] Este pan se elabora exclusivamente por procedimientos artesanales.