El término Patriotten (del griego πατριώτης, "compatriota") se había utilizado para denominar a un grupo político del siglo XVII por Andries Bicker y la faccion Loevenstein,[3] pero cuando Francia invadió Holanda en 1747 (en el contexto internacional de la guerra de sucesión austríaca e interno de la revolución orangista), los "patriotas" demandaron la vuelta del estatúder Orange, que puso fin al segundo periodo sin estatúder.
Los patriotas aristócratas (también llamados oudpatriotten -"patriotas viejos"-), inicialmente el grupo más fuerte, se podían considerar como regenten en la oposición, que o bien buscaban entrar en las facciones en el poder, o bien intentaban realizar el ideal loevensteniano de una república sin los Orange; provenían del partido pro-Estados.
[5] Finalmente, el término Patriottentijd no se usó en la época, sino que es una creación historiográfica del siglo XIX, comparable a las expresiones utilizadas para designar al Eerste Stadhouderloze Tijdperk ("primer periodo sin estatúder"), al Tweede Stadhouderloze Tijdperk ("segundo periodo sin estatúder") y a la Fransche Tijd ("era francesa", que es como también se denomina a la República Bátava, el Reino de Holanda y el periodo del Primer Imperio francés, 1795–1813).
[Nota 1] El término se solía usar de forma peyorativa, pero con el tiempo ha adquirido una connotación más positiva.
El tamaño absoluto del producto nacional bruto se mantuvo, pero la posición de la economía en el contexto internacional fue sobrepasada por otros países europeos en el siglo XVIII.
Además, en ciertos sectores económicos como la pesca y las industrias florecientes a comienzos del siglo XVII se produjo un descenso en términos absolutos.
La base industrial en reducción se concentró en determinadas zonas en perjuicio de otras en las que antes la industria textil o la construcción naval había sido importante.
Hubo devastadores efectos en la movilidad social, que predominantemente pasó a ser descendente, hacia los estratos más bajos de la sociedad neerlandesa.
Tanto el ejército (formado por mercenarios) como la marina se redujeron en el periodo siguiente, impidiendo a los Países Bajos mantener sus pretensiones de ser una potencia militar considerable, con las consecuencias diplomáticas que ello conllevaba.
Quedó claro que su papel en el equilibrio europeo había pasado a ser subalterno de Francia, Prusia e Inglaterra.
A esta situación se había llegado gradualmente, ya que en la edad media las corporaciones (como las guildas y las schutterijen -guardias cívicas-) tenían un poder nominal sobre el vroedschappen, otorgando al menos algún poder político a los miembros de la clase media (aunque considerar tal sistema como "democrático" sea exagerado).
Así pues, los regenten del partido de los Estados que habían controlado el gobierno durante el segundo periodo sin estatúder fueron reemplazados por hombres del partido orangista, que eran ideológicamente opuestos a la influencia popular, cerrando la puerta a los experimentos democráticos.
Entre los dos concluyeron un acuerdo secreto para un tratado de amistad y comercio entre las dos repúblicas, lo que fue descubierto por los británicos cuando interceptaron a Henry Laurens en el mar.
El mayor enfrentamiento fue la Batalla del Banco Dogger (1781), entre una escuadra neerlandesa dirigida por el contraalmirante Johan Zoutman y una británica dirigida por el vicealmirante Sir Hyde Parker, que terminó en tablas, aunque con toda la flota neerlandesa protegida en puerto debido a su "falta de preparación", según sus propios comandantes.
[17] El descontento creció tras el acuerdo de los Estados Generales con Francia (en 1782) sobre un "concierto" o alianza naval que debería llevar a planificar acciones conjuntas contra Gran Bretaña.
No obstante, quedó dañada ante la opinión pública la reputación de la marina neerlandesa y del estatúder como su comandante en jefe, lo que socavaba al régimen.
Posteriormente se descubrió que había sido escrito por uno de los amigos de Adam, Joan Derk van der Capellen tot den Pol, y que su exitosa distribución había sido organizada por François Adriaan van der Kemp.
[28] Por supuesto, Aan het Volk van Nederland solo era uno de los muchos panfletos, tanto orangistas como patriotas, que se publicaron durante el Patriottentijd.