El historiador Augusto Alba Herrera señala que probablemente la pasó «entre los campos de Marián y Huaraz».
Ante estos hechos, a finales de febrero los alcaldes acompañantes solicitaron que se libere a su líder y se enfrentan al prefecto encargado en ese momento: Javier Collazos, quien ordena liberarlo, no sin antes cortar sus trenzas y las de todos sus seguidores.
José Collazos (teniente gobernador) conociendo que la desproporción del número de hombres era descomunal y lo desfavorecía huyó amparado por la noche.
Esta situación duró varios meses hasta que desde Lima se envió un contingente al mando del coronel José Iraola.
Este sólo aceptó en sus filas a naturales que hablaran quechua como única lengua, reclamó el retorno de los Incas y rechazó todo lo occidental utilizando un discurso milenarista hasta que fue capturado y ejecutado en septiembre de 1885.
Atusparia es el personaje principal de un drama homónimo escrito por el literato peruano Julio Ramón Ribeyro.