En biología evolutiva, el poliedro de Galton es una metáfora acuñada por Francis Galton para ilustrar la interacción entre el azar (selección natural) y el determinismo (constricciones internas) en la evolución de los organismos.
Últimamente, Stephen J. Gould ha recuperado esta metáfora para ilustrar el papel de las constricciones internas en la filogénesis: Según Gould, frente a la metáfora de Galton, el programa adaptacionista consideraría a los organismos como esferas, que podrían moverse en todas las direcciones del plano (es decir, evolucionar en todas las direcciones, sin ninguna constricción.
Al contrario, las caras del poliedro de Galton ilustran el número de direcciones limitado en las que uno organismo podría evolucionar.