Botado en 1915, no pudo ser echado a pique al quedar encallado en Scapa Flow.
El Baden no iba a ser internado en Scapa Flow según los términos del armisticio, pero substituyó en la lista al crucero de batalla Mackensen, que estaba incompleto y no tenía capacidad para navegar.
La tripulación del Baden intentó echarlo a pique al igual que el resto de la flota internada en Scapa Flow, pero los británicos consiguieron encallarlo.
En primer lugar, los monitores Erebus y Terror dispararon sus cañones de 15” (381 mm) a partes seleccionadas previamente del casco y de su superestructura, detonando varias bombas en su cubierta.
Finalmente, los acorazados de la flota británica del Atlántico, usando su artillería principal, terminaron con él.