La Secretaría de Relaciones Exteriores fue una de las instituciones político-administrativas que creó en 1936 el general Franco, tras su nombramiento como jefe del gobierno del bando rebelde durante la Guerra Civil Española.
Pese a que su mayor prioridad era alcanzar la victoria militar, de inmediato creó una Junta Técnica del Estado para que le ayudase a gestionar las labores de gobierno.
[3] En aquel momento, la toma de Madrid parecía inminente y, con ella, la victoria definitiva.
[4] El 2 de octubre el rebautizado como Boletín Oficial del Estado publicó la ley que creaba este y otros organismos.
Su labor fue más burocrática que política, pues las importantes relaciones exteriores eran dirigidas por otras personas u organismos.
[15] Por último, aunque podía utilizar a distintos colaboradores para sus negociaciones, Franco se reservaba siempre el papel predominante en la diplomacia y su superior autoridad era indiscutida.
[18] Tras la conquista del norte, Franco trasladó su cuartel general a Burgos.