El bosque fue incendiado deliberadamente en el verano de 1851 por orden del político y agente colonizador chileno Vicente Pérez Rosales.
[1] A Pichi Juan, un nativo huilliche, se le encomendó la tarea de incendiar el bosque.
Pichi Juan lo hizo iniciando incendios en varios lugares.
[1] El incendio duró unos tres meses y en un momento se reportó que la ciudad de Valdivia (a 130 km de los focos) estuvo bajo un humo denso durante semanas.
[4] El incendio es considerado como la primera gran catástrofe ambiental documentada en Chile realizada por mano del hombre contra la naturaleza.