Diodoro dice que tras la muerte de Alcídice, Salmoneo tomó una segunda esposa llamada Sidero, que trataba a Tiro con dureza, como una madrastra.
Sidero se refugió en un templo de Hera, pero Pelias la mató encima del altar.
[3] Aunque el nombre de Sidero ya está atestiguado en Sófocles,[3] el personaje pertenece a la tragedia y por eso a veces no concuerda bien con la sucesión genealógica de los Eólidas.
[4] Autores tardíos dicen que Tiro, ya siendo criada en el palacio de Creteo, era atormentada por Sidero;[2] pero no se indica si Sidero se había desposado después con Creteo.
Probablemente el relato tardío ya unió las dos versiones existentes: la de la épica, en la que no interviene Sidero[5][4] y la de la tragedia, en la que sí aparece.