Dicha cuestión pudo significar en su momento un aval de independencia, el cual no caracterizaba a otras organizaciones canarias o estatales.
Posteriormente llegarían los mejores momentos de movilización y acción del S.E.C.
En el año 2002 sufre una nueva escisión, y sectores vinculados a Juventudes Comunistas fundan el Comité de Estudiantes.
En las elecciones al claustro de ese año decide pedir el voto para la Asamblea del Movimiento Estudiantil Canario, otro grupo de izquierda donde participaban algunos antiguos componentes del S.E.C.
defendía los derechos de los estudiantes fomentando la iniciativa asamblearia en los centros educativos y universidades canarias, pero también se implicaba y realizaba campañas de temas sociales, como contra la xenofobia, la insumisión al servicio militar obligatorio, la ecología, la defensa de la identidad, etc.[3]