En la tradición china, los varones portaban el apellido y el patrimonio familiar después del matrimonio.
Según la obra maestra escrita en 1892 por Han Banqing Sing-Song Girls of Shangai, también conocida como Flowers of Shangai, la gente de Shanghái llamaba a las mujeres que actuaban como cantantes y músicas "xian sheng" en lengua Wu.
Muchas sing-song girls se acababan casando con su patrocinador para empezar una vida libre.
Cuando Shanghái fue dividida en diferentes concesiones gobernadas libremente por múltiples partidos, hubo una mayor libertad para que las sing-song girls actuaran ante el ojo público sin repercusiones legales.
Acorde con los ideales confucianos de virtudes domésticas como la modestia, el estándar de vestimenta femenina tendía a ocultar las formas, cubría del cuello a los pies y se usaban colores sobrios.
Un ejemplo de esto puede ser visto en el qipao, el cual empezaron a usar desde finales del siglo XIX más ceñido, en colores vivos e incluso modelos sin mangas, o con ellas cortas y abiertos a cada lado hasta la rodilla.
[7][6] En cierto modo, al menos en Shanghái, las cortesanas de más alto rango se convirtieron en las primeras celebridades modernas.
Consiguientemente, utilizaron esa fama para continuar extendiendo los límites impuestos por la cultura conservadora tradicional en formas que popularizaron la tecnología moderna y mayor expresión de la sexualidad femenina.