[1] La traducción audiovisual se define como la transferencia de textos multimodales o multimedias a otras lenguas.
Las producciones audiovisuales son multimodales porque para realizarse se apoyan en un rango amplio de recursos o modos (lenguaje, imagen, música, color, etc.).
[2] La traducción audiovisual[3] puede trazar sus comienzos durante el periodo del cine mudo, en los intertítulos de las películas.
[2] Es hacia finales del siglo XX que la investigación académica se interesa por el fenómeno y comienzan los estudios formales de la disciplina.
En 1985, André Lefevere postula la teoría del patronato en la que se estudian los factores extralingüísticos de la traducción, por ejemplo socioeconómicos e ideológicos.