Tras la derrota de Batlin en la Isla Serpiente, el Guardian desaparece al Avatar a un mundo que ya había conquistado; Pagan.
Posteriormente Garriot explicaría: «[...] sacrifiqué todo para calmar a los accionistas, cosa que fue un error.
Como resultado, muchos fanáticos de la serie se molestaron con Ultima VIII pese a sus numerosas características interesantes.
Estos artefactos le permiten entrar al Plano Etéreo y derrotar a los Titanes en sus propios terrenos.
Luego el Avatar reconstruye el portal de piedranegra que originalmente le permitió al Guardián entrar a Pagan.
Al entrar en el portal reconstruido, el Avatar es teletransportado de regreso a Britannia, que ahora es gobernada por el Guardian.
El juego tiene problemas al ser iniciado en Windows 98 y superiores, e incluso con parche hecho por los fanes (véase enlaces externos) puede que sea inestable.
Una de las más buscadas se titulaba Ultima VIII: Exilio, basada en el motor Neverwinter Nights, pero dicho proyecto fue cancelado.