Jugó durante 4 temporadas con los Pipers de la Universidad Hamline, en los que promedió 13,6 puntos por partido.
Fue elegido para el All-Star Game en seis ocasiones, e incluido en el segundo mejor quinteto de la liga en otras 4.
Acabó su carrera deportiva al finalizar la temporada 1958-59, con 30 años de edad, perdiéndose tan solo 4 partidos en las 10 temporadas que disputó.
Durante 3 temporadas consecutivas fue el jugador que más faltas personales realizó, y todavía mantiene el dudoso honor de ser el jugador que más veces ha sido descalificado por faltas en toda una carrera, con 127.
En total promedió 14,4 puntos y 9,4 rebotes por partido.