El avión, conocido con anterioridad como «Goldfinch» pero en el momento del accidente bautizado como «River Orrin», contaba con 131 pasajeros y seis tripulantes a bordo.
A las 06:12 hora local (05:12 UTC), durante la fase de despegue, el capitán Peter Terrington y el primer oficial Brian Love oyeron un ruido fuerte que procedía de la parte inferior del avión.
Pensando que alguna rueda se había quemado, decidieron abortar el despegue y activar las reversas para efectuar un frenado de emergencia.
[2] Tras esto, la sección anterior del chasis fue eyectada del motor, perforando uno de los tanques de combustible y posibilitando que el combustible fluyese libremente sobre el motor recalentado.
Todo esto contribuyó al desenlace final de la rotura que llevó accidente.
El frenado suave del motor permitió al fuego expandirse y un reducido tiempo de evacuación.