Tuvo destacada participación en la epidemia de fiebre amarilla que asoló Buenos Aires en 1871.
Juan, cuya descendencia adoptaría finalmente el nombre Jorge como apellido, llegó al país en 1818 y se estableció en Concepción del Uruguay.
Su hermano Miguel llegaría diez años más tarde y también fijaría domicilio en la ciudad entrerriana.
[3] Tras la batalla de Pavón retomó la carrera, que pronto se vería nuevamente interrumpida.
[5] que nutrieron y constituyeron el grueso de la Sanidad Militar Argentina al comienzo del conflicto.
[3] Una vez en tierra, en reconocimiento a su arrojo el comandante Elía comisionó a Damianovich para que escribiera y condujera el parte del suceso al Ministro de Guerra general Martín de Gainza.
Al caer víctima de la enfermedad el doctor Caupolicán Molina, Damianovich quedó al frente del Hospital y por los servicios prestados a la población mereció la medalla de oro acordada por la Municipalidad.
[3] Durante la campaña contra los implicados en la revolución de 1874 Damianovich sirvió en el Hospital Militar.
[3] Durante la misión Damianovich recorrió 1350 leguas (500 a caballo) revisando hospitales, ambulancias y botiquines de campaña, experiencia que le permitió a su regreso proponer en su informe diversas medidas para el mejoramiento del servicio sanitario del ejército.
[3] El hall central del Hospital Militar Central de la calle Luis María Campos lleva el nombre de Eleodoro Damianovich al igual que el Hospital Regional Córdoba, ubicado en la capital provincial.
Se negó sin embargo a recibir el escudo de Curupaytí que se le había otorgado, ya que no había asistido al combate por encontrarse en Buenos Aires de licencia médica.
[14] El doctor Pacífico Díaz afirmaba que «Era un hombre de gran corazón e ideas claras y bien definidas.
Sus informes médicos a la superioridad revelan un conocimiento científico y sagacidad clínica admirables».