Debido a esto es que en las zonas occidente y centro del país se encuentren bastantes sitios arqueológicos algunos con una larga variedad de montículos y restos humanos pertenecientes a sociedades bien organizadas.
Incluyendo a Copán, ya que dentro de este periodo se encuentra su mayor auge cultural y expansión demográfica.
[5] Ciudad Blanca tal vez fundada por la etnia local Pech, que radica ancestralmente en la región.
Los glyptodontes, los cholamttheres, y los armadillos, estos últimos son los únicos representantes de estos organismos en el presente,) a evidencia fósil demuestra giyptodontes (Giyptotherin) Floridanun, identificados por el Dr. Dave Gillet y posiblemente chamytheres que existieron en Honduras durante el pleistoceno.
Canidae, estos cánidos Pliocenos encontrados en Honduras, son osteoburus (cynoides y amphicyon sp).
Un felino fósil encontrado en Yaroconte, departamento de Copán está registrado como Felis Concolor, datado del pleistoceno.
La primera etapa de su gestión se caracterizó por una casi exclusiva dedicación a la investigación arqueológica —dígase, Copán—.
La primera Ley para la Protección del Patrimonio Cultural de la Nación fue emitida en 1984 y reformada más tarde dando lugar al Decreto 220-97, 1998.
También fueron cultivadores de frutas originarias del continente como la Papaya, la Piña, el Tomate y Aguacate.
Algunos restos arqueólogos muestran que estos pueblos también habían representaciones de sus dioses ya sea en grabados rocas o pinturas.
Esto fue sostenido gracias a los sitios arqueológicos que se remontan al pre-clásico medio.
Tras la caída del imperio Azteca en 1521 con la victoria de Hernan Cortes y sus aliados, Gil González Dávila se convirtió en el primer español en llegar a lo que hoy es Honduras, con propósitos de conquista; tuvo que enfrentarse con una enorme, violenta y bien organizada resistencia indígena.