Luétiga

Estos primeros tiempos supusieron un intenso trabajo de campo estableciendo comunicación con todos los viejos músicos populares de Cantabria (gaiteros, piteros, dulzaineros, rabelistas, pandereteras, tamboriteros, cantantes...).

Su primera actuación importante tiene lugar en el año 1988 en el Folk-Segovia, donde tras el éxito cosechado reciben una propuesta de grabación del primer disco.

Es aquí dónde surgen los primeros problemas internos del grupo en cuanto a la línea a seguir, bien dirigiéndose hacia un sonido más eléctrico o profundizar en la identidad de la música tradicional cántabra.

Prescinden de esta forma de bodhrán, flautas irlandesas o gaita gallega, incorporando al pito montañés y otros clarinetes, gaita cántabra y percusiones tradicionales.

En 1994 graban Nel el Vieju, donde incorporan más temas cantados con letras tanto tradicionales como de elaboración propia.