Monte Neme

En la zona existió una fuerte presencia de cultos paganos, como demuestra la tradición oral que llega a nuestros días con la creencia de fuentes purificadoras.

Con la llegada del cristianismo, estos lugares fueron cristianizados, y se irguió una ermita bajo la advocación de Santa Cristina.

En el lugar se mezclan leyendas, que le dan al monte un carácter sagrado o telúrico, de hecho la tradición oral le asignó al propio monte significados especialmente de carácter pagano y demoníaco.

El chómlech ya había sido descrito por autores como Manuel Murguía o Luis Monteagudo.

Es muy posible que ya en la época romana, griega o fenicia, habían sido explotados los yacimientos de estaño del monte, elemento muy apreciado de aquella.

Según apuntan los documentos, la primera concesión de la mina para extraer wolframio y caolinita dataría de 1923, prorrogándose en sucesivas ocasiones hasta el año 2012, cuando la mina se abandona.

[3]​ En 2017 la Junta de Galicia lo empleó como reclamo turístico, rectificando posteriormente por ser esto inadecuado (toxicidad, desastre ambiental, peligrosidad).

Panorámica desde el monte Neme
Mina abandonada del monte Neme