Proceso de Paz israelí-palestino
Como peor, ha sido algo más que un eslogan usado para enmascarar el paso del tiempo.
Los palestinos han mantenido varias posturas y percepciones del proceso de paz.
Sin embargo, hay una serie de motivaciones ocultas para que Israel niegue el Estado Palestino.
Palestina, como estado, podría acceder a las convenciones internacionales y traer acciones legales contra Israel en varios asuntos.
Podría incluso implicar a la Corte Penal Internacional y entablar una demanda contra Israel por crímenes de guerra.
Ello sería una situación "polvorín" que muy probablemente se precipitaría en un conflicto en el Oriente Medio.
[28][29] La resolución 242 de ONU fue aceptada por Israel, Jordania y Egipto; pero rechazada por Siria hasta 1972–1973.
[40][41] El asunto del Derecho de los refugiados palestinos al retorno sería resuelto por importantes compensaciones económicas.
[42][43][44] No existía ninguna solución posible que satisficiera a las demandas israelí y palestina, incluso bajo intensa presión de los EE.
[42][44] En los siguientes meses a la cumbre Clinton designó al anteriormente Senador de EE.
Estados Unidos e Israel solicitaron una figura de Primer Ministro y ambos rechazaron trabajar nunca más con Arafat.
El plan reclamaba acciones independientes por las autoridades israelí y palestina, aplazando los asuntos en diputa hasta que hubiera un entendimiento.
Olmert, por su parte, presentaba un plan en el que los asentamientos escasamente ocupados serían evacuados.
También reclamó que los asentamientos israelíes conservarían el derecho a crecer y expandirse en Cisjordania.
[59][60] En mayo de 2012, Abás reiteró su disposición a reunirse con los Israelíes si ellos proponen "algo prometedor o positivo".
[61] Netanyahu contestó, en menos de una semana en abril, a Abás, por carta, y por primera vez reconociendo oficialmente el derecho de los palestinos a tener su propio estado, aunque como anteriormente[62] declaró que debía ser un estado desmilitarizado,[63] y que su nuevo gobierno de unidad, proporcionó una nueva oportunidad para renovar negociaciones y avanzar.
Las negociaciones comenzaron en Washington D. C.,[67] se programó desplazarlas al Hotel Rey David en Jerusalén, y finalmente a Hebrón.
Al llegar la fecha fijada, las negociaciones fracasaron, con el enviado especial de EE.
Los siguientes seis meses se enfocarían en asuntos como los refugiados, Jerusalén, asentamientos de colonos, seguridad y recursos hídricos.
Posteriormente, tal como se había advertido, Abás firmó la documentación par implicar a la Corte Penal Internacional.
En marcado contraste a la hoja de ruta, no es un plan para una tregua temporal, sino una amplia y detallada solución, afrontando todos los asuntos en juego, en particular, Jerusalén, los asentamientos judíos y el problema de los refugiados.
También se propuso otra aproximación fue propuesta por algunas partes dentro y fuera de Israel: Una "Solución de un estado binactional", por el cual Israel se anexionaría formalmente los territorios palestinos, pero incluiría a los ciudadanos árabes palestinos en estado único secular.
En realidad, no era una nueva idea, remontándose hasta la década de 1920, pero tuvo una relevancia extra debido a las crecientes preocupaciones demográficas generados por la rápida expansión de la población árabe en Israel y los territorios ocupados.
Teniendo en cuenta la magnitud de los conflictos políticos y demográficos que se generarían, esta parece una solución poco probable para el problema.
El resultado es que israelíes y palestinos se han cansado del proceso.
En teoría, esto permitiría las negociaciones hasta un "autoacuerdo" definiendo la paz que se obtendría.
La falta de claridad sobre lo que sucedería tras llegar al acuerdo, resultaría en presiones insuperables sobre Abás para reclamar su inmediata implementación.
Sin embargo, desde el punto de vista israelí, los palestinos no están listos para crear un estado estable.
[117] Tal como están las cosas ahora, esto lleva al proceso a otro punto muerto.
Está principalmente diseñado para fomentar los esfuerzos en el sector privado, una vez los gobiernos proporcionen los servicios y la inversión inicial.
