El cuerpo acuático a atravesar entre ambas repúblicas es el Río de la Plata, un curso fluvial con características atípicas como anchura notable con escasa profundidad.
Esto permitiría diseñar proyectos innovadores que se adaptasen específicamente a los particulares rasgos hidrográficos del río.
Mediante esta obra se buscaba mejorar el tráfico vehicular, tanto de automóviles como del transporte de cargas, reduciendo notablemente la actual distancia terrestre entre las capitales de ambos países, Buenos Aires y Montevideo, ya que hoy el cruce terrestre más próximo es el Puente Libertador General San Martín, que une Puerto Unzué con Fray Bentos.
Del lado argentino sería fácil que, sin atravesar ningún centro poblado, se la conecte con la red vial a través de la autopista Buenos Aires - La Plata.
[2] Si bien del lado argentino la franja costera es un área protegida, la zona de mayor biodiversidad (la más próxima al río) no sufrirá un gran impacto ya que el trazado allí correrá sobre un viaducto sobreelevado.
[2] El método constructivo consistía en fabricar elementos pre-moldeados en el obrador en tierra para luego transportados al lugar de destino.
Los puentes serían 5, el primero es el denominado “Auxiliar”, se erigiría próximo a Punta Lara.
En el comienzo eran dos los puentes secundarios previstos, pero ante el pedido de la Armada del Uruguay se incluyó en el diseño un tercero.
Otros proyectos fueron de dos ingenieros: el argentino J. Villar y posteriormente, en 1941, el uruguayo Horacio García Capurro.
[6] En el año 1972 fue creada la “Comisión Binacional Puente Buenos Aires-Colonia”, integrándola con funcionarios argentinos y uruguayos, para que comenzaran a estudiar la viabilidad del proyecto.
[2] En 1974, fue presentado al presidente uruguayo Juan María Bordaberry una propuesta para la construcción del puente que una Colonia con Buenos Aires por parte de la consultora Palmer and Baker Engineers Inc.
En 1978 ambas cancillerías marcan el interés en la construcción del puente, al que se le adosaría un gasoducto.
En 1984 el Partido Colorado se mostró favorable a la construcción del puente, incorporándolo al programa de gobierno.
También se creó, con personería jurídica internacional, la "Comisión Administradora del Puente Buenos Aires-Colonia", encargada de gestionar todo lo relacionado con la conexión binacional.
Esta misma encargó, a la consultora Louis Berger, analizar comparativamente las ventajas y desventajas de 5 trazas que se habían propuesto.
[5] El diputado argentino Héctor Polino presentó ante su congreso un proyecto de ley para desechar el tratado firmado en 1996 y optar por la traza Delta-Carmelo.
[7] La propuesta no se centró en el desarrollo de un puente exclusivamente carretero, el proyecto permitiría una conexión ferroviaria complementaria.
[7] La inversión necesaria para realizar la obra sería asegurada por la garantía de soberanía; mientras se demuestre que el ejercicio económico es factible, únicamente los estados deberán fiscalizar y avalar que las obras se hagan.
Fue descartada por los inconvenientes económico-técnicos que conllevaba, con menor rentabilidad económica-financiera respecto a la “traza A”; por trastornos en lo que respecta al ordenamiento territorial; por estar las aguas costeras de Avellaneda fuertemente contaminadas; por requerir la construcción de un by-pass a la ciudad de Colonia para desviar el enorme flujo vehicular con destino hacia el este; y porque impactaría paisajísticamente las perspectivas del río desde Colonia, especialmente al atardecer.
[20] Todos los cursos navegables que interceptaban se había previsto superarlos mediante la construcción de elevados puentes.
La traza D1 sumaba además el inconveniente que se debía construir un canal paralelo al recorrido del puente.
[2] Si bien los análisis de factibilidad del proyecto estuvieron en etapas avanzadas, diversas circunstancias provocaron que aún no se haya llevado a cabo la construcción del puente, el cual se habría sumado a las tres conexiones terrestres existentes entre ambas repúblicas (Concordia con Salto —Puente Salto Grande—, Colón con Paysandú —Puente General Artigas— y Gualeguaychú con Fray Bentos —Puente Libertador General San Martín—).