Gran Semana

El impulso centrífugo del federalismo neogranadino volvió a surgir durante la guerra civil, como había pasado durante la Patria Boba, sólo que en esa anterior ocasión la guerra contra España impuso a las ideas centralistas.

Se iniciaba un conflicto entre el poder central y las regiones que duraría hasta el fin del siglo XIX.

El 11 de octubre el general Francisco Carmona y Lara se alzó con 300 soldados en Ciénaga, marchando a Santa Marta a destituir al gobernador y proclamar el «Estado Soberano de Manzanares».

A la mañana siguiente llegó el general París con 500 infantes y 300 jinetes, lo que calmó la situación.

A las 15:00 horas del 28 de noviembre la hueste gubernamental entró en una ciudad adornada para recibirla y que arrojaba a su paso flores, guirnaldas de laurel y gajos.

[4]​ El gobierno decidió atender todos los levantamientos a la vez para impedir que ninguno se volviera incontrolable.

[10]​ También se ordenó al coronel Eusebio Borrero sofocar Antioquia, Chocó, Buenaventura y Cauca.

[4]​ Puesto que los rebeldes controlaban los puertos y los ingresos de las aduanas, el presidente recurrió a emprestamos forzosos para pagar el esfuerzo bélico.

[13]​ Urdaneta, enviado en diciembre para pacificar la región con 70 soldados del 2.º escuadrón de húsares, resistió hasta el día siguiente, cuando tuvo que rendirse al haberse agotado las municiones y con muchos heridos.

Bogotá en 1846, acuarela de Edward Walhouse Mark .