Asedio de Haarlem

Tras establecerse el asedio, ya el día 18 de diciembre se ha situado la primera batería de cañones y, precipitadamente, el día 20 se da el primer asalto al revellín que fracasa y que obliga a don Fadrique a establecer un asedio en toda regla.

Los holandeses también usaron hombres calzados con patines para hacer llegar pertrechos a la ciudad.

Los sitiados hacían frecuentes salidas en las que atacaban a las tropas españolas y durante las cuales aprovechaban para introducir víveres.

Su padre encolerizado le escribió: Haarlem debía caer en manos españolas.

Desde el exterior se intentó entrar suministros en la ciudad mediante hombres equipados con pértigas para salvar los obstáculos a través de los canales y zonas inundadas.

El conde lo realizó raudo debido a que si no se derrotaba a los rebeldes el asedio se podía prolongar demasiado y los españoles tendría que levantar el sitio.

Bossu construyó 100 bajeles, otras fuentes dicen 68, y se dirigió velozmente al lago, presentando batalla formalmente el 26 de mayo, el enemigo era superior, tenía 150 bajeles, aunque otras fuentes nos hablan de 180, pero finalmente se impuso el hecho de que la batalla se desarrolló al llamado "estilo español", abordando las naves enemigas y hacer que los infantes hagan el trabajo.

Mapa de la ciudad de Haarlem hacia 1550.
"Beleg van Haarlem" grabado neerlandés de 1573 mostrando las ejecuciones masivas, decapitaciones y cuerpos lanzados al río, tras la toma de la ciudad por las tropas del Duque de Alba .