Este nombre no hace más que atestiguar la presencia de una comunidad judía numerosa en Sanabria, y por supuesto en Limianos, que una vez convertidos harían uso de un espacio reservado en el templo y accederían por esta puerta anterior.
Estas columnas de influencia toscana son las más representativas del estilo renacentista castellano.
En el interior, resulta llamativo el altar dieciochovesco barroco casi cercano al rococó sobredorado y con una vívida policromía.
Aunque oculta en la nave lateral, no se debe olvidar la representación de la Santísima Trinidad.
En ella Las Tres Personas se encuentran en forma humana cual rededor de una mesa, aunque presenta una gran estaticidad.
El hombre posiblemente había sufrido algún tipo de accidente médicamente atestiguado que le impedía realizar el Servicio Militar.
Para recuerdo de esta curación las muleta están expuestas en la parte posterior del templo, junto al confesionario.