Rafal

Los primeros pobladores que habían sido enviados por el califa para repoblar la Vega Baja fueron instalándose en pequeños núcleos dispersos, incluso a veces en los abandonados asentamientos de íberos y godos.

Mientras que los rahales eran fincas privadas pertenecientes a importantes personalidades del mundo político-social de la sociedad árabe.

Por el contrario, Rafal fue una finca particular de algún mandatario árabe que ha permanecido con su extensión actual desde aquellos lejanos tiempos.

También introdujeron los cítricos, las moreras y el algodón, cultivos que en Rafal ya no se abandonarían.

A raíz de la sublevación, los musulmanes fueron expulsados, perdiendo sus propiedades y los privilegios que se les habían permitido en un principio.

Desde ese momento, dieron comienzo las repoblaciones cristianas de la Vega Baja, fundamentalmente por familias catalanas y aragonesas.

La inseguridad ciudadana reinante durante este periodo en la Vega Baja, no garantizaba una continuidad al frente de las tierras por parte de sus arrendatarios, ya que durante los primeros periodos de repoblación era muy común que los propietarios funcionales a los que se les habían designado tierras, abandonaran su patrimonio y se trasladaran a zonas más seguras.

Rahal Al-Wazir, tras caer en posesión de los cristianos y con el paso de los años, cambiaría su denominación al pasar a llamarse simplemente Rahal, siendo abandonado el sufijo árabe Al-Wazir.

El fuero Alfonsino tenía como condición para ser alcanzado, la de ser un poblado con un mínimo de quince casas con quince matrimonios cristianos residentes en ellas, y que estuvieran dispuestos a trabajar las tierras cedidas por el señor del lugar.

La almazara se encontraba en la ubicación que hoy ocupa un edificio de cinco plantas situado frontalmente al nuevo ayuntamiento, en la calle Marqués de Rafal (replaceta Martín Salinas), y el molino situado por entonces a las afueras del pueblo, que hoy en día corresponde a la esquina formada por las calles ¨El Molino¨ con ¨Maestro Albéniz¨.

Este molino estuvo activo hasta 1962, aunque para entonces ya pertenecía en propiedad a una familia residente en el municipio.

Por entonces eran tres calles y una plaza lo que formaba el núcleo urbano de Rafal.

Existía la obligación de llevar todo el grano obtenido al molino del marqués.

Lo normal era que repitieran en el cargo durante años mientras no existieran numerosas quejas.

La primera junta directiva tuvo como presidentes a José Pertusa García y a Manuel Valero Martínez, como conciliario al párroco Carlos Irles Vinal (tiene una calle dedicada en Rafal) y un total de ocho vocales.

En las segundas elecciones municipales celebradas en 1983 salió victorioso el PSOE encabezado por Agustín García Martínez, que también llevó a cabo importantes obras públicas de carácter hidráulico.

El jueves día 5, el Alcalde de Orihuela Luis Fernando Cartagena Travesedo ordenó que nadie pernoctara en la pedanía oriolana del Mudamiento debido a las crecidas del Río Segura.

Pero se le acusaba de ¨paralizar¨ al pueblo debido a que no llevó a cabo ninguna obra pública de importancia, y hasta aquel momento era eso lo que se había venido haciendo en las anteriores legislaturas.

Un concejal de AP votó a favor del cese del alcalde de centro en un pleno extraordinario en el que salió como nuevo alcalde el concejal socialista Engracio Ruiz Villaescusa que desde 1987 encabezaba su partido.

En las elecciones de 1991 venció el nuevo candidato socialista Francisco Bernabeu Sarmiento.

Durante este periodo, la localidad duplicó su extensión urbanizada, y se llevaron a cabo una serie de obras públicas que modernizaron el municipio.

Durante su tercera legislatura fue aprobado el Segundo Plan Urbanístico de Rafal y se le adjudicó al municipio la construcción del instituto de secundaria, cuyas obras no se iniciaron hasta más tarde.

En los comicios celebrados en 2003, el que ya era alcalde de Rafal desde hacía un año salió ganador con mayoría absoluta.

Los descontentos del pueblo, de tradición socialista, llevaron al PP a la victoria en las elecciones municipales celebradas en 2007, con José Arronis Navarro como nuevo alcalde, siendo esa la primera y única ocasión en la que ha gobernado el PP en Rafal.

Desde el punto de vista urbanístico, la legislatura del PP fue bastante activa, ya que se desarrollaron varios proyectos de importancia para el municipio, si bien es cierto que el alcalde José Arronis contó con las financiaciones de los planes Plan E y Plan Confianza para poder llevar a cabo sus proyectos.

También se realizó una total remodelación de la Parrala (plazas que rodean a la iglesia), cuyo estado era lamentable cuando el PP llegó a la alcaldía y que incomprensiblemente había sido un asunto desatendido y olvidado por el PSOE, a pesar de ser un lugar tan céntrico y transitado (paradójicamente, el PSOE llamó ¨La Parrala¨ a su programa televisivo emitido en Tele Rafal durante los cuatro años que ocupó la oposición).

Y se iniciaron las obras para la construcción de un nuevo consultorio médico, ubicado en el Sector Sur.

Además, ambos partidos están inmersos en una absurda e irresponsable espiral de acusaciones cruzadas sobre quien liquidó en mayor medida los bienes y recursos municipales.

Ya a final del mes de agosto se comienza con actos civiles, y se da salida a las fiestas; durante cinco semanas hasta el día grande por excelencia que es el 7 de octubre, día de la Patrona la Virgen del Rosario; se llevan a cabo diferentes actos y para todos lo públicos.

Por primera vez, en el 2007, la Comisión de Fiestas, organiza una Mascletá en honor a la Virgen del Rosario.

Arriba, de izquierda a derecha: el hijo de Modesto Hernández, Doña Julia, el escritor rafaleño Modesto Hernández Villaescusa, sentada la madre de Martín Salinas, el Alcalde de Rafal Martín Salinas Valero , José Valero Urios, y debajo de éste, sentado Martín Salinas (hijo).
Nª Sra. del Rosario