Pancho Villa hizo un ofrecimiento al gobierno alemán para comprar este crucero y otros más.
El armamento principal del barco estaba compuesta por diez cañones SK L/40 de 105 mm (4,1 pulgadas) montados en pivotes simples.
El armamento secundario consistía en ocho cañones SK L/55 de 52,8 mm (2 pulgadas), también montados en un solo pivote.
[7] El propósito del viaje era representar a Alemania en la Celebración Hudson-Fulton en Nueva York.
[7] La colisión causó daños significativos en el Dresden, aunque nadie en ninguno de los dos buques resultó herido.
A pesar del embargo estadounidense, los alemanes entregaron las armas y municiones al gobierno mexicano el 28 de mayo.
Frente a la boca del río Amazonas, detuvo un buque mercante británico el 6 de agosto.
Después de llegar a Trinidad, se reunió con el cañonero SMS Eber y varios vapores.
Desde ahí zarpó con la flota hacia la costa sudamericana, específicamente al cabo de Hornos.
Spee interrumpió inmediatamente la operación y giró hacia el este para huir antes de que los barcos británicos pudieran alcanzar a su escuadrón.
Un minuto después, dio la orden de abrir fuego contra el barco alemán Leipzig.
[39] Los británicos no deseaban que el SMS Dresden se les escabullera y dieron una batida de caza por toda la región austral sin encontrarlo.
La tripulación sobrevivió gracias a la abundante caza, pesca y fuentes de aguas naturales bebestibles, así como a la ayuda de algunos escogidos alemanes residentes en Chile, tales como Harry Rothenburg y Albert Pagels radicados en Punta Arenas (Chile).
Estas personas gestionaron el aprovisionamiento de carbón, víveres y noticias a la tripulación alemana.
[35] Sus tripulantes fueron recogidos y evacuados más tarde a Valparaíso en un barco de aprovisionamiento alemán.
Pero los británicos reconocieron al SMS Dresden e informaron por telegrafía sin hilos a sus pares, siguiéndole bajo el horizonte.
Lüdecke decidió que su barco ya no estaba operativo, e internó para conservarlo.
El día 10, Lüdecke recibió por radio la autorización del Almirantazgo alemán para permitir que el Dresden fuera internado, por lo que Lüdecke informó al funcionario chileno local de su intención de hacerlo.
[42][43] La gobernación chilena sólo ofreció 72 horas de reparación con sus propios medios o internación.
Los británicos hicieron caso omiso de este mensaje, así como un barco chileno que se les acercó cuando ingresaban a la bahía.
Los artilleros alemanes dispararon tres cañonazos en respuesta, pero los cañones fueron rápidamente silenciados por el fuego británico.
[46] El Dresden hizo algunos disparos, pero una batería de popa fue alcanzada muriendo siete tripulantes.
Canaris explicó que el Dresden ya había sido internado por Chile y luego regresó a su barco, que mientras tanto había sido preparado discretamente para ser hundido y evitar su captura.
[44][40] Los heridos más graves fueron atendidos por los mismos británicos y trasladados a Valparaíso en el transporte Orama.
En premio a su desempeño fue el primer oficial autorizado a huir del archipiélago chileno, donde se suponía que toda la tripulación del Dresden debía permanecer internada hasta el fin de la guerra.
[51] La situación política en México en 1910 era caótica, los gobernantes eran derrocados continuamente, ante lo cual Alemania envió al crucero SMS Dresden para cautelar los intereses y la seguridad de la colonia alemana residente.
[30] La nave navegaba rumbo a Alemania cuando estalló la Primera Guerra Mundial, agosto de 1914.
Se ocultó en los canales patagónicos del sur de Chile donde fue ayudado y aprovisionado por el ciudadano alemán Harry Rothenburg, que residía en Punta Arenas.
Allí la nave terminó su reparación y continuó su navegación hacia el norte, debiendo fondear en la isla Robinson Crusoe, pues ya no tenía carbón para sus calderas.
Finalmente fue localizado por varios buques de guerra británicos y hundido en la bahía Cumberland.